Morita Carrillo

Morita Carrillo

lunes, 19 de abril de 2010

BIBLIOGRAFIA

AÑO PUBLICACIÓN TEMA EDITOR

1953 Festival del rocío poemas Fundación Eugenio Mendoza
1954 Cuadernos de Doñana poemas Asociación de escritores de VLA.
1955 Escenario para los reyes magos
1957 Jardines del niño Dios poemas Ministerio de Educación
1959 Kindergarten de estrellas poemas Editorial Villegas
1963 Columpios del iris poemas Revista Lírica Hispana Nº 247
1964 El canto de los días poemas Ediciones Cabriales
1965 Once puertas y una estrella Banco del libro/INCIBA
1966 Tilingo poemas INCIBA
1968 Torres de celofan
1969 Morita Carrillo (Poetas Yaracuyanos III) Soc. Bolivariana Larista
1977 Linterna de papel poemas Ediciones CO-BO (Colegial Bolivariana)
1979 Cancioncillas jardineras Ediciones CO-BO
1980 Llave de siete colores Ediciones CO-BO
La fuente de las voces teatro Ediciones CO-BO
Retablillo de juguetes teatro Ediciones CO-BO
Los colores son actores teatro Ediciones CO-BO
1980 Edad de colores (preescolar) Ediciones CO-BO
Edad de colores (Libro primero) Ediciones CO-BO
Edad de colores (Libro segundo) Ediciones CO-BO
Edad de colores (Libro tercero) Ediciones CO-BO

1981 Jardín de lectura cuentos Editorial Arte

BIOGRAFÍA

BIOGRAFIA

Morita Carrillo nació en Nirgua, Edo. Yaracuy, Hacienda El Escondido, el 21 de Febrero de 1921. Hija de Tulio Carrillo y Justina Delgado, formó parte de una pequeña y modesta familia conformada por los padres y dos hijas: Josefa y Morita. La muerte de su padre las obliga a mudarse a casa de unos familiares, donde permanece hasta los 19 años.
Comenzó a trabajar en 1938 en la escuela “Juan Manuel Velásquez Level”. Al llegar a Caracas decide mantenerse cerca de los niños y del aula. Concursa por un cargo en la Escuela Experimental Venezuela, dirigida a la sazón por el Prof. Sabás Olaizola. Gana la plaza y trabaja varios años hasta que el matrimonio y la maternidad, la obligan a dejar la escuela.
Casó con José Antonio Puche Giardiello (Tony) dibujante técnico y pintor artístico, con quien comparte su vida por más de cuarenta años. De ésta unión nacen cuatro hijos: José Antonio, Milagros, Fabiola y Eduardo.
Lectora incansable, Morita fue autodidacta. Estudió en su pueblo hasta sexto grado, lo cual no impidió que hiciera una gira por toda América Latina dando charlas de literatura infantil, recibiera la Orden Andrés Bello (1962) y fuera nombrada hija ilustre del Yaracuy.

Existen tres bibliotecas públicas con su nombre y una guardería infantil. La crítica literaria la consagró al calificarla como la poetisa venezolana cuya “obra no naufragó entre rimas y diminutivos”. Otros opinan que es la escritora venezolana “que ha sabido comprender el mundo alucinante de los niños” o “que su poesía pareciera escrita por niños”.
Cosechando la convivencia labores caseras - obra poética, logra publicar su primer libro de poemas en 1953 “Festival del rocío”. Después de esto, se desata una larga lista de 21 publicaciones. Algunas de ellas son: Cuadernos de Doñana (1954), Escenario para los reyes magos (1955), Jardines del niño Dios (1957), Kindergarten de estrellas (1959), Columpios del Iris (1963), El canto de los días (1964), Once puertas y una estrella (1965),Tilingo (1966), Torres de celofán (1968), Morita Carrillo, Poetas yaracuyanos III (1969), Linterna de Papel (1977), Cancioncillas jardineras (1979), Llave siete colores (1980), La fuente de las voces, Edad de colores (lecturas), Edad de colores , Pre-escolar (1980), Jardín de lectura ( Morita Carrillo y Fabiola Puche, 1981).

En 1953 comenzó a trabajar en Tricolor, cinco años después es nombrada Jefe de Redacción, en la época en que la revista estaba dirigida por Rafael Rivero Oramas. Prestó servicio en el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (INCIBA) bajo la dirección del Dr. José Luís Salcedo Bastardo. Fue asesora del Banco del Libro donde dirige la publicación denominada “Once puertas y una estrella”. Al regresar al INCIBA es designada por el Lic. Simón Alberto Consalvi para dirigir la publicación de dos colecciones infantiles: “Puente dorado” y “La estrella amiga”.
En 1969 se desenvuelve como asesora de la Primera Dama Alicia Pietri de Caldera, quien le encomienda llevar adelante el Programa de Ediciones de la Fundación Festival del Niño, “Páginas para imaginar”.

Según el crítico literario y ensayista Efraín Subero, Morita propone los siguientes fines de la poesía infantil:

 Despertar profundas sugerencias en el alma del niño.
 Señalar vías para el goce estético.
 Enriquecer el caudal de imágenes del juego en su pensamiento.
 Refinar su gusto y ayudar a estructurar su personalidad.
 Estimular al niño para que se exprese bellamente, es decir, que le incite a crear.
 Ayudarlo a descubrir, casi sin tener conciencia de lo que hace, que él sienta poéticamente.
 Dejar en el inconsciente del niño un recuerdo maravilloso que se incorporará a su futuro desenvolvimiento, y
 Crear en él una especie de conducta subjetiva, llamada a salvaguardar sus intereses espirituales.”


Al final de su vida, una larga y cruel enfermedad la postró en cama y la fue aislando del mundo. Morita Carrillo muere en Nirgua, el 30 de Septiembre de 1998 dejando a sus espaldas una vasta y maravillosa obra poética.

lunes, 5 de abril de 2010

GALERIA DE FOTOS



Morita y su madre
                                      Astolfo Carrillo, el tío bueno



        Los "cuatro frutos de mi amor"                                      Morita en casa
como nos llamaba mamá.
                                                                                    




José Antonio (Tony) Puche, esposo de Morita



Motita y sus hijos en el Museo de Los Caobos




La poetisa Morita Carrillo









Fotos cortesía de su nieta Adriana Montani



Morita, Tony y tres de sus hijos,
en México




Mamá con sus hijos alrededor,
en México



Mamá posando para la cámara



Morita en un parque


Morita y su esposo Tony, en Chile.
Una de las paradas en su gira
por América Latina.

MENSAJES A LOS EDUCADORES

Opiniones extraidas del prólogo de su libro
"CANCIONCILLAS JARDINERAS"






"La escuela ha recibido el encargo de comunicar a los niños, como materia indispensable, el mensaje poético, por estar la poesía considerada como un elemento integral del mundo infantil."

Cancioncillas jardineras "son versos que por su esencia juguetona, por su brevedad y por no haber sido eximidos de las cualidades artísticas indispensables, reunen las condiciones requeridas para la mentalidad de los pequeños".

"Ahora pasemos a un aspecto muy importante. ¿Debe el niño comprender cabalmente la poesía que se pone a su alcance?.La respuesta categórica es: no. La poesía no revela claramente sus secretos; por eso precisamente es la poesía. Si el niño no comprende, de cualquier modo su sensibilidad será mecida suavemente por el encantamiento de su musicalidad, del ritmo, de la visión de conjunto, lejana y subjetiva."

"Si recordamos que el mundo infantil gira dentro de la órbita de la belleza, será fácil reconocer, que la poesía es su elemento natural."

"La poesía ilumina los enigmas del subconsciente, vigoriza la imaginación; ennoblece, por cuanto parta de lo burdo y lo chabacano; proporciona el punto de partida hacia el gesto evocador...o simplemente satisface las ansias de ternura juguetona. ¿No es suficiente?"

ASÍ PENSABA MORITA...

Prólogo del libro LINTERNA DE PAPEL.





"Se ha dicho con sobrada razón que vivimos una civilización uniforme y mecanizada, insuflada se sólo aspiraciones materialistas. Sabemos que no es exagerado. El hombre-máquina es un hecho palpable. Aclaremos. El impulso al cual hacemos referencia, conlleva el progreso y todo progreso es positivo si se saben crear paralelamente los elementos necesarios para atender las necesidades más recónditas del ser que se alimenta de tal civilización"


"Si se logra para el niño un mundo interior armonioso, será armonioso su íntimo desenvolvimiento. No quiere decir esto que la poesía, o dicho con más propiedad, las esencias poéticas, puedan actuar como panacea. Pero no cabe duda de que sus virtudes docentes ayudan favorablemente a estructurar la personalidad del niño, dejando el sedimento evocador que luego será capaz de contribuir al equilibrio en la adolescencia."



"En cuanto a la poesía, la infancia es el terreno más propicio para sembrar."



"El niño está muy capacitado para disfrutar de la poesía, puesto que ésta es uno de los elementos más afines a su alma. Recordemos que el niño piensa en imágenes; que si no alcanza a expresar lo que siente, es simplemente por pobreza de lenguaje. Aquí entra en función muy activa la poesía: ella le estimula para que exprese con libertad su sentir plástico y musical del mundo, o sea que le incita a crear."



Otros efectos de la poesía en los niños:
"1. Despierta profundas sugerencias en el alma del niño.
2. Enriquece el caudal de imágenes dentro del juego del pensamiento
3. Señala vás para eñ goce estético.
4. Vigotiza la imaginación.
5. Hace nacer en el niño un deseo involuntario de participación en el mundo de la belleza.
6. Ennoblece, por cuanto aparta de lo burdo, de lo chabacano."



"Es afortunado el niño que tiene la oportunidad de ser cultivado en su sensibilidad, tanto como en su inteligencia."

domingo, 4 de abril de 2010

LINTERNA DE PAPEL

Poemas de Morita Carrillo, extraídos
de su libro "Linterna de papel"











CANCIONCILLA DE HORARIO
Y MINUTERO

Siempre jugando a la rueda,
dan vueltas, recorren millas,
dos hermanos que parecen
caballitos de la trilla.

Pic, pac... pic, pac
¡yo delante, tu detrás!
Pic, pac ¡LLegaré primero!
Los dos marcan el compás
con sus casquitos de acero.
Pic, pac ... pic, pac.



NIÑO ENERO

Ya llegó Niño Enero
y abrió la ventanita al Año Nuevo.
En rumor de carroza resplandeciente,
trajo a los reyecitos
que venían de Oriente.


EL LIBERTADOR

Mamá: con vocecita fiel,
quiero decir ¡Libertador!
Yo no sé hablar muy bien,
pero lo digo con amor
¡Libertador!
¡Libertador!

Mamá:tú me tienes a mí
y el continente tiene a su Simón.


BANDERA VENEZOLANA

Canario, azulejo, cardenal,
componen la bandera nacional.
Azulejo voló cerca del cielo
y robó siete estrellitas en su vuelo.
Ésta historia bonita
vino a contarla un hada a mi escuelita.


BOLIVAR EL DE LOS NIÑOS

Simoncito fue pequeño,
hizo caballos de leño
y sobre ellos jineteó.

Una vez tuvo ¡cinco años!
usó calzones de paño
y botines de tacón.

Mordía guayabas, duraznos,
y cabalgaba en un asno
tras Don Miguel José Sanz.

Tenía tan corta estatura,
que se treparía en zancos
para hacer ciertas diabluras.

Una vez en la casona,
cinco jaulitas ¡muy monas!
tenía Doña Concepción.
El diablillo abrió las puertas
volaron los pajaritos
y desde ese día Simoncito,
¡se sintió Libertador!


CANCIONCILLA DE MI AGUJA DE COSER

El ojito es como un túnel,
el hilo pasa como un tren.
¡Qué chica trabajadora
es mi aguja de coser!

Ara en silencio la tela
y siembra el hilo después...
Mi manita que la empuja
¡O es tractor o es buey!


CUMPLEDÍAS DE UNA FLOR

Es cumpledías de una flor
y ella ofrece su pastel.
¿Lo va a comer el cigarrón
con cucharita de hoja miel?

Viene la abeja con su ayuda,
ella es campana sin cordel.
Alegremente el grillo barre
con escobita de llantén.

Tierra fragante en los zapatos,
cerros velludos bajo el sol...
Dios lo regala todo, todo
¡Es cumpledías de una flor!

Oh, guacamaya de arco iris
ángel de azúcar y papel...
Hagan un viaje de emergencia
¡Porque invitados son también!


LAS PALOMAS

Son pañuelitos de niebla.
Son manojillos de arroz...
o sombrillas voladoras
de pasear el Niño Dios.

El apellido es plural,
los nombres nadie los sabe.
Escriben los vuelos largos
en un papel de paisaje.

Llegadas por vías trémulas,
traen el grano o las migajas
y los pichones se esponjan
de jubiloso lenguaje.

CANCIONCILLAS JARDINERAS




Poemas de Morita Carrillo
extraidos de su libro
CANCIONCILLAS JARDINERAS
Editorial CO-BO



MI CASITA ES ASÍ

Cuatro paredes ¡muy blancas!
El techo como una flor.
La campanita en la puerta.
¡Y una ventanita abierta
para que nos mire el sol!


MÚSICA NATURAL

Mi casita está rodeada
de música natural:
de noche cantan sapitos...
¡Y de día canta el turpial!


LA MÁQUINA DE LAVAR

Doña lavadora
muy trabajadora
levanto montañas
de blanco espumón.
Restregó la ropa
como una señora
¡Y luego hizo alegres
pompas de jabón!

MI PAPÁ

Yo me siento muy seguro,
papá, cuando estoy contigo,
¡porque tu eres el más grande
y bueno de mis amigos!

DUERME HERMANITO, DUERME...
(Cancioncilla con palmadas)

¡Pon-tirineta mi mamá
con una espiga de canción,
abrió una puerta de ilusión
y mi hermanito duerme ya!

Trae un cocuyo su farol,
corren enanos de jazmín..
¡Y crece un techo protector
como una estrella de aserrín!


ABUELITA MADRUGADORA

Igual que la estrella
de la mañita
¡Con pasos callados
llegó la abuelita!


LA NIÑA I

Chiquí, negrí, delgadí...
¡No es hormiguita!
¡Es la I!


EL NUBARRONCITO

El nubarroncito jugaba solito,
y lo empujó el viento,
¡Lo volvió a empujar!
Le sopló a los ojos...
Le volvió a soplar
¡Y el nubarroncito
se puso a llorar.


CANCIÓN DE LOS COLORES PRIMARIOS

Bajo los cielos azules,
en el sendero amarillo,
para ser también primario,
se vistió de rojo el lirio.


LUZ DEL AGUA

El agua se puso
deleantal de vidrio...
Y bajó a vender
¡Luz a domicilio!


EL ARROYITO

El arroyito camina,
sin pararse a descansar.
¡Tiene que encontrar un río
para que lo lleve al mar!


EROSIÓN

Los ratones de la lluvia
con sus dientes de cristal,
se han comido las raices
de la estrella vegetal.


LA TORTUGUITA

Cuatro pezuñitas,
medio cascarón,
dos ojos ¡muy tristes!
que miran al sol...
Y un pescuecito
tan arrugadito
¡como un acordeón!


LA GARZA

Va la garza por la arena
montada en un par de zancos...
¡Para no ensuciar la seda
de su vetidito blanco!


LA VIOLETA

No es coqueta la violeta.
Escondida se la pasa,
con su batica morada
y en quehaceres de la casa.


EL CAPACHO

Todo el mundo lo conoce
porque tiene un familión.
¡Muchos hijos, muchos hijos,
le crecen alrededor!
Vive en una torre verde
¡Y rojo es su camisón!



LA CEBOLLITA


Se puso la cebollita
camisa de celofán.
No quedó muy bien vestida
y otra camisa se puso,
y otra más
y otra más...
¡Hasta que cubrió del todo
su corazón de cristal!


MI ESCOBITA BAILADORA

Con mi muñeca yo sé bailar.
Con mi escobita bailo mejor.
Yo creo que a fuerza de practicar
¡Las dos bailamos al mismo son!

lunes, 22 de marzo de 2010

KINDERGARTEN DE ESTRELLAS

Poemas extraidos de su libro
KINDERGARTEN DE ESTRELLAS (1959)
Editorial Villegas




EL CANDADO

Yo soy pequeño,
pero vivo alerta,
porque tengo la casa
a mi cuidado.

Yo soy como el zarcillo
de la puerta
¡Y me llamo candado!


LA LLAVE

Mi ropa es de metal
y brilla a veces
como brillan los peces.
Cerradura de llama
mi hogar.
Y aunque soy chiquita,
esta puerta grandota
me obedece.


EL DEDAL

Abuela trajo a mi dedo,
un sombrerito de acero.
Mi dedo es un caracol
que ha encontrado su vivienda.
Mi dedito es un bombero
con su casco de metal.
Mi dedo buscó un escudo:
la aguja es lanza y lancero.
Ah, sombrerito de acero,
escudo, linda vivienda,
fuerte casco de metal.
Pero dicen en las tiendas
y que se llama "dedal".


LA FALDITA FLOREADA

Esta faldita floreada
parece un jardín abierto.
Y cuando la esponja el viento,
una nube tornasol.
Con ella me siento grande,
llena de gracia me muevo...
Y hasta me he montado en zancos
para sentirme mayor.


MI PRIMER DIENTE

Ya está aquí mi primer diente.
De leche dice la gente,
pero a todos aseguro
que mi dientico ¡es bien duro!

Granito gordo de arroz.
Y su brillo es de granizo.
El dentista no lo hizo
¡Me lo puso Papá Dios!


LA NIÑA Y SU ESPEJO

Yo tengo, yo tengo
nariz pecosita
y dos orejitas
como un par de seis.
Pestañas y cejas
hacen montañitas.
Tengo blancas rejas
de dientes de arroz.
Dentro de mis ojos
dos niñas bonitas...
Y un río pequeño
me canta en la voz.


DE HIERRO, SEDA Y ROCÍO

Zapaticos de hierro
para el caballo.
Zapaticos de seda
para el bebé.
Boticas de rocío
para la araña.
Y zapatos de cuero
para mi pié.

Oh, mis deditos
limpios y abrigados.
Son como ratoncitos
que acaban de nacer.
O los siete
enanitos de Blancanieves
se han convertido en diez.



RETOÑARON PANECILLOS

Todo granito de trigo
del molinero es amigo.
En la harina siempre están
las semillitas del pan.
Ya está metida la harina
en un saco que camina
y busca por el sendero
la casa del panadero.
La sembraron en la artesa
e inflada pasó a la mesa.
Vengan a ver... ¡Qué sencillo!
Retoñaron panecillos.


LA GUACAMAYA

Creo que soy
un pedazo de carnaval.
Prima de la zaranda
bulliciosa.
Un vitral que galopa.
Un íris emplumado.
Una pizca de sol...
Pero si llevo el vuelo
desmadejado,
sólo soy
un harapo multicolor.


LA ESMERALDA

Yo soy un lago escondido
en el mundo mineral.
Y en tu pequeño zarcillo,
gotita de agua de mar.

viernes, 19 de marzo de 2010

MORITA VISTA POR SUS HIJOS

La biografía de mamá se escribe sola, la marca su poesía, la dirige su ingenio, la enaltece su candor, es tan sencilla y pura como su poema de la azucena: “La azucena tan coqueta, se empolvó el cuello con cal y después compró en el campo, el más blanco delantal”.

Morita Carrillo nació en Nirgua, Edo. Yaracuy, Hacienda El Escondido, el 21 de Febrero de 1921. Hija de Tulio Carrillo y Justina Delgado, formó parte de una pequeña y modesta familia conformada por los padres y dos hijas: Josefa y Morita.

Su desarrollo estuvo estrechamente ligado a la naturaleza: el viento conformó sus límites. El cielo dio forma a sus ambiciones, la diversidad definió su imaginación cada vez que cabalgaba un árbol, los olores a tierra orientaron sus rutas diarias y los pájaros, verduras y frutas ayudaron a fraguar su entorno social. Por eso, de niña, se perciben ya sus dotes creativas: escribe y relata historias fantasiosas que hacen reír a los oyentes; y de adulta, su incontenible manantial poético se desbordaba en las situaciones mas cotidianas: “Porque vino el colibrí y ella se encontraba sola, ¡Acudió todo el rubor al rostro de la amapola”

Morita tenía la facultad de escribir cosas simples, para las cosas simples. Cantaba a todo aquello que podía pasar desapercibido con pocas y concisas palabras, quizás por eso homenajeaba a los utensilios: “Mi rastrillo jardinero, vestido a todo color, con sus uñitas de acero arrastra hojas y rumor.” Mientras elaboraba una comida podía improvisar: “La lechuga del huerto se puso una faldita verde y rizada ¡para asistir a la fiesta de las ensaladas!”. Disfrutaba y festejaba la navidad adornando el hogar, pero con la peculiaridad de producir literatura espontáneamente “Bajo el techo de un caney, tan pobre como no hay dos, entre la mula y el buey ¡Ha nacido el niño Dios!

Nunca la vimos sentada en un escritorio, concentrada en escribir. Para mamá engendrar poesía era un don. Su creación desbordaba en ocasiones como un manantial noble, fuerte y fresco que discurría sin obstáculos en medio de un momento de reflexión: “Sal blanco mineral, niña de mina, cieguita de alacena… te pareces un poco a la neblina y un poco a la azucena”. Otras veces emergía como una corriente de agua que cae sobre una roca y se fragmenta en mil goticas: “Igual que la estrella de mañanita, con pasos callados llegó la abuelita”. Después, coronaba el acto con una risa que celebraba sus logros y buscaba su cuadernote escolar, donde con un lápiz de punta roma, anotaba las ideas “para que no se me olviden”.

A los dos años, la pérdida de su padre marcó su destino. A partir de entonces vive en casa de familiares que fuetearon su sensibilidad siempre expuesta y rieron de las características que mas tarde le permitieron marcar huella. Sin embargo se ve obligada a vivir en su pueblo natal hasta los 19 años trabajando como maestra, hasta que un incidente familiar pone al descubierto la fortaleza de su carácter y con un atado de ropa, se va la capital “en busca de mejores aires”.

Al llegar a Caracas decide mantenerse cerca de los niños y del aula, para ello consigue una entrevista en la Escuela Experimental Venezuela, dirigida a la sazón por el Prof. Sabás Olaizola. Compite con varios aspirantes por el cargo de maestra, cuyo requisito fue improvisar una clase. ¡No se podían poner más fácil!. Gana la plaza y trabaja varios años hasta que el matrimonio y la maternidad, la obligan a dejar la escuela.

Poco tiempo después de llegar a Caracas conoció a José Antonio Puche Giardiello (Tony). A los seis meses,en 1944, envuelta en una pasión que duró más de cuarenta años, se casó con él. De ésta unión nacen cuatro hijos: José Antonio, Milagros, Fabiola y Eduardo.

Lectora incansable, Morita fue autodidacta. Estudió en su pueblo hasta sexto grado, lo cual no impidió que hiciera una gira por toda América Latina dando charlas de literatura infantil. Recibió la Orden Andrés Bello en su tercera clase (1962) y fue nombrada hija ilustre del Yaracuy.

Era curioso presenciar en sus recitales la reacción de los oyentes ante su poesía: la gente reía de la ingenuidad y lo sorpresivo de sus versos: “No es coqueta la violeta, escondida se la pasa, con su batica morada y en quehaceres de la casa." Todavía recuerdo: “Porque es chiquitica, así … y tiene una cinturita ¡Parece una muñequita, las cáscara de maní!".

Existen dos bibliotecas públicas con su nombre y una guardería infantil. La crítica literaria la consagró al calificarla como la poetisa venezolana cuya “obra no naufragó entre rimas y diminutivos”. Otros opinan que es la escritora venezolana “que ha sabido comprender el mundo alucinante de los niños” o “que su poesía pareciera escrita por niños”. “Con mi muñeca yo sé bailar. Con mi escobita bailo mejor. Yo creo que a fuerza de practicar ¡Las dos bailamos al mismo son!”

Durante el período que fungió como madre se potenció su prolífica obra creativa. Cada acontecimiento familiar constituía un evento literario. Así fue como escribió a su hija Milagros “Esta regaderita con que yo riego mi jardín, la hicieron de una lámina de zinc… (fragmento)” o escribió al calzado de Fabiola “Zapaticos rojos vamos a correr porque el sol ha abierto su lindo clavel…(fragmento)”. De mismo modo surgió “Yo me siento muy seguro papá cuando estoy contigo, ¡porque tu eres el más grande y bueno de mis amigos!”dirigido a los hijos varones.

Cosechando en la convivencia: labores caseras-obra poética, logra publicar su primer libro de poemas en 1953 “Festival del rocío”. Después de esto, se desata una larga lista de 21 publicaciones. Algunas de ellas son: Cuadernos de Doñana (1954), Escenario para los reyes magos (1955), Jardines del niño Dios (1957), Kindergarten de estrellas (1959), Columpios del Iris (1963), El canto de los días (1964), Once puertas y una estrella (1965),Tilingo (1966), Torres de celofán (1968), Morita Carrillo, Poetas yaracuyanos III (1969), Linterna de Papel (1977), Cancioncillas jardineras (1979), Llave siete colores (1980), La fuente de las voces, Edad de colores (lecturas), Edad de colores , Pre-escolar (1980), Jardín de lectura ( Morita Carrillo y Fabiola Puche, 1981).


Al final de su vida, una larga y cruel enfermedad la postró en cama y la fue aislando del mundo. Morita Carrillo muere en Nirgua el 30 de Septiembre de 1998 rodeada de todos aquellos que la amaron. En sus mentes perdurará la cancioncilla con palmadas que la identificaba: “Pon-tirineta mi mamá con una espiga de canción, abrió una puerta de ilusión y mi hermanito duerme ya…”

Fabiola Puche de Moreno
15 de Marzo de 2010